- Mucho se habla en el último tiempo sobre los “hipsters” y algunos ya empiezan a considerarlos como la tribu urbana más popular del momento. Sin embargo, el término ha creado confusión a más de uno y no es para menos. Porque… ¿quiénes son ellos realmente?
Por Débora Huentrul
Usan audífonos y anteojos de gran tamaño, son fanáticos de la tecnología, específicamente de la marca Apple y los Iphone. Paradójicamente adoran las cosas retro, como los vinilos, las máquinas de escribir y la ropa tejida. Frecuentan mucho el café “Starbucks” y también son cultos, por lo que suelen declarar que les encanta leer. O, al menos, eso es lo que algunos de ellos pretenden conseguir.
Pero lo cierto es que este singular grupo es mucho más complejo en sí mismo de lo que parece a simple vista, ya que en realidad el hipster, tal como se le conoce actualmente, sería solo un imitador de los originales “hipsters”: personas que no seguían ninguna moda y gustaban de las cosas alternativas.
Los clásicos nerds que no encajaban mucho en la sociedad.
Los hipsters buscan a toda costa diferenciarse del resto, cuidando al máximo su forma de vestir y adoptando actitudes de forma más bien superficial, algo que sus inspiradores originales nunca habrían pretendido de forma consciente.
Y es que habría dos clases de hipsters: los que quieren serlo y aquellos que nunca lo pretendieron. Los imitadores y los originales. Los que han creado una moda y los que odian las modas.
“Los originales hipsters, a diferencia de las otras tribus urbanas, no se autodenominaron así: es una etiqueta impuesta por el entorno” explica Camila Guisande, estudiante en práctica de diseño escénico del instituto Arcos que sigue con atención los pasos de esta singular tendencia “Lo que pasa es que originalmente los hipsters nunca buscaron crear una moda, sino diferenciarse de quienes hacían las tendencias y las modas. Pero como suele ocurrir en la sociedad, algunos sintieron la necesidad de crearles una etiqueta y ahora muchos se vuelven “hipsters” para seguir esa supuesta moda. Eso crea gran confusión, ya que ahora solo por el hecho de que te guste leer y uses lentes o te gusten las cosas antiguas ya empiezan a llamarte hipster”
Los hipsters de hoy son nerds cools que se manejan en todo tipo de temas de conversación, que gustan de ir a sitios bohemios, adoran la comida orgánica e invariablemente todo lo que sea alternativo: el cine alternativo, la literatura alternativa, el arte alternativo. Es decir, diferenciarse a toda costa del común de la sociedad, en la que no quieren ser encasillados.
Mucha gente, sin embargo, solo ha adoptado actitudes de los auténticos hipsters tras creer que se trata de una moda, y son justamente ellos quienes, para horror de varios, quienes han adoptado los gustos de los clásicos “nerds” de antes como un tipo de moda que en realidad solo pretende aparentar intelectualidad.
“Es muy común que mucha gente, especialmente la gente joven, busque diferenciarse del resto. Lo que pasa es que los hipsters caen en la triste imitación de las verdaderas personas auténticas. Donde yo estudio, en la Arcos, está lleno de imitadores que quieren hacer creer al resto que son auténticos” señala Camila Guisande “El hipster reunió los gustos de la gente que no se adhería a las modas y pretende seguirlas todas al pie de la letra, algo que es tremendamente superficial, ya que sus gustos solo se basarían en gustos ajenos”
Los originales hipsters
Muchos no lo saben, pero los hipsters surgieron hace bastante tiempo. Fue en los años 40, en Estados Unidos, cuando se empezó a utilizar por primera vez la palabra “Hipster” para denominar a aquellos que gustaban de cosas diferentes y alternativas, específicamente la música jazz.
Los hipsters de entonces frecuentaban mucho los clubes de jazz, ya que admiraban el estilo de vestir y la actitud relajada de los músicos, generalmente hombres de color que usaban ropa elegante pero informal y lentes oscuros, quienes además poseían un sentido del humor inteligente, inclinado hacia lo irónico.
Así fue como los hipsters comenzaron a adoptar las actitudes anteriormente descritas y a acercarse a comunidades afroamericanas tanto por su música, por su baile y actitud, a veces simulando tener una vida sin muchos recursos, cuando en realidad era todo lo contrario.
Luego volvió el renacimiento del hipster cuando los gustos de los denominados “nerds” comenzaron a ser admirados por quienes querían diferenciarse del resto a toda costa. Y mezclando los gustos de los primeros hipsters con los gustos de los nerds, surge nuevamente esta suerte de sub-cultura que revoluciona a muchos de los jóvenes en la actualidad.
La metamorfosis del término Hipster
En la retina colectiva la imagen del hipster se aleja bastante de aquel que surgió en los años 40, 50 y 60, ya que los nuevos hipsters han creado una idea más bien superficial de los ideales que encarnaba la verdadera sub-cultura.
Por ejemplo, muchos de los hipsters actuales son una especie de caricatura estética que adopta actitudes anti-modas cayendo, de forma invariable, en la imitación y la contradicción. Por ejemplo, cuando los grupos de música que les gustan se hacen conocidos y populares, inmediatamente dejan de gustarles porque no soportan tener los mismos gustos que “la masa social”.
Por otra parte, el hipster original jamás habría utilizado productos tecnológicos de marca Apple o Canon ni habría frecuentado sitios caros como Starbucks, ya que ellos se inclinaban por un tipo de vida más modesta y alejada de lo materialista.
Los primeros hipsters tampoco se preocupaban en demasía de apariencia ni su forma de vestir, ni mucho menos de lucir cortes de pelos singulares para diferenciarse de los demás. La diferencia la marcaban con su personalidad intelectual y sus gustos alternativos.
Hoy en día la anti-moda se ha vuelto una verdadera moda que ha perdido gran parte de sus primeros valores e inclinaciones, siendo adoptada generalmente por jóvenes de clase acomodada que creen tener una opinión clara de las cosas cuando en realidad no es así. Jóvenes que buscan destacar del resto diferenciándose de este, pero sin tener ninguna base intelectual ni original de fondo, ya que solo reinterpretan actitudes a su manera, pero sin entenderlas realmente.
Nathaly Tiznado, popular bloguera experta en temas tecnológicos, geeks y culturales, dice al respecto:
“Gran variedad de hipsters fieles a las raíces originales del término “Hipster” han intentado crear una división entre la masa popular y sí mismos, pero dicha tarea se ha hecho especialmente difícil para ellos, a causa de dos grandes hechos: El primero es que la gran mayoría de la sociedad tiene una idea fija de que los hipsters son lo que presentaron la mayoría de los jóvenes entre los años 2011 y 2013. Y el otro gran hecho es que cada vez existen más jóvenes que deciden seguir esta línea sin investigar el real significado, y por lo tanto solo imitando las tendencias nacidas entre los años 2011 y 2013”.
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