La ropa es también para muchas mujeres una forma de enviar mensajes, por eso no es de extrañar que la ministra de Igualdad, Irene Montero, decidiera lucir un outfit muy especial hoy, 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Además de la manifestación y la sesión del congreso, un acto institucional en el instituto de la mujer estuvo hoy en la agenda de la responsable de igualdad de oportunidades. Para esta cita, Irene Montero eligió un original traje compuesto por pantalón y americana.
Este set proviene de Joplin Atelier, una empresa española fundada en 2016 por las hermanas Aida y Laura Molano tras un viaje por la Ruta 66. “Este gran viaje en general, y este pueblito de Missouri en particular, donde ni siquiera tenía planeado parar, resultó ser el punto de partida de nuestro viaje con la moda y el lugar donde se tiró del hilo para crear nuestra proyecto. Tormentas de polvo, estética rockera y un road trip nostálgico enmarcan la idea de este nuevo viaje”, así describen el surgimiento de la marca online.
Joplin Atelier ofrece ropa tanto para compra como para alquiler. Su objetivo es evitar la sobreproducción de prendas, por eso ofrecen el alquiler de sus patrones como alternativa al sobreconsumo. Según nota de prensa de la compañía, el traje que eligió Irene Montero es una pieza única hecha con excedentes de tela, por lo que no hay dos iguales.
El traje elegido por la ministra consta de dos partes, una americana amplia con solapas y un pantalón de cintura alta con pinzas. Como no podía ser de otra forma, el morado es el color dominante, aunque existen otras tonalidades como el amarillo y el gris. Lo combinó con una camiseta negra lisa y zapatos rojos.
Joplin Atelier apuesta por la moda ética, justa y hecha a medida, y sus fundadores afirman que “como la moda es una industria que hay que cuidar, nuestras piezas se cocinan a fuego lento”. Todas las prendas de Joplin Atelier se fabrican por encargo y a mano en su taller de Barcelona, contribuyendo a una moda más justa y evitando el exceso de stock.
Las prendas, que oscilan entre los 200 y los 700 euros, son de inspiración western y tienen un diseño contemporáneo.